Bilial Neccar, de siria, agradece poder representar a Turquía en eventos internacionales. Foto: Daily Sabah

Dos taekwondistas sirios representarán a Turquía en eventos internacionales, según publicó en su sitio web el medio turco Daily Sabah.

La noticia asegura que Bilal Neccar y Hassan Abbas, que se encuentran en condición de refugiados en Turquía, ahora podrán participar en eventos internacionales representando al país otomano. A pesar que no tienen la nacionalidad, pues se encuentra en trámite.

El medio detalla que ambos jóvenes entrenan en el Centro de Acogida Kilis Öncüpınar, mismo que recibe soporte por parte de World Taekwondo (WT) a través de la fundación dirigida a refugiados, en Estambúl.

Kilis Öncüpınar es digirido por el profesor Mustafa Tohumco. Quien recibió el agradecimiento de los deportistas por poder cumplir el mayor de sus sueños: competir a nivel internacional.

“Yo estoy dispuesto a olvidar todo el dolor que tuve que atravesar”, dijo Neccar. Además, detalló que espera poder pelear en el Turkey Open 2018 bajo la bandera roja con blanco.

Por otra parte, Abbas adujo que espera poder recibir la nacionalidad turca para levantar la bandera cuan alto se pueda, “por la hospitalidad que hemos recibido”.

Las historias de Neccar y Abbas, quienes rondan los 20 años, se unen a la lista de taekwondistas que deben cumplir sus metas deportivas bajo una bandera que no tiene país. A pesar que la suerte de ellos pareciera ser la misma que la de Raheleh Asemani, por ejemplo, quien recibió una nacionalidad.

Asemani, oriunda de Irán, tuvo que huir de su país por la guerra; y clasificó a Juegos Olímpicos de Río 2016 bajo la bandera de, en aquel momento, WTF -hoy WT-; sin embargo, meses después pudo adquirir la nacionalidad belga y representarle en la cita veraniega de aquel agosto.

Raheleh Asemani: la historia que debe ser contada

La suerte para este par de sirio pareciera la misma a la de Asemani, pues todo indica que lograrán mantenerse bajo la cobija del símbolo turco más honorable: su bandera.

Estas historias cada vez salen con más frecuencia a la luz pública, gracias al trabajo de la Fundación Humanitaria del Taekwondo, pues el despliegue para dar calidad de vida a los refugiados de Oriente Medio y África, especialmente, es increíble.

Raheleh Asemani, peto rojo, se enfrenta en la ronda de dieciseisavos de final del Mundial Muju 2017, ante la iraní Tayebeh Parsa. Foto: Esteban Mora.

Incluso el Comité Olímpico Internacional, trabajó el tema de la mano con WT, pues la labor ejecutada es de suma importancia. Ya que uno de los fines principales es sembrar paz donde solo se cosecha dolor, muerte, destrucción, sufrimiento y guerra.

La organización se consolidó en la Asamblea General de Naciones Unidas en 2015, y a partir de ahí se acordó utilizarle como herramienta de paz y agente de calidad de vida hasta 2020.

En aquella ocasión el equipo de exhibición de WT se presentó en la sala de sesiones, con lugar en Nueva York.

El presidente de WT, Doctor Chungwon Choue, ha sido enfático en desarrollar este tipo de proyectos tanto en su vida como desde el comando de la Mundial. 

Esteban Mora, Exclusivo MasTKD.com