Francisco Palacios “lo más difícil de hacer Taekwondo”

 

Francisco Palacios sabe que la evolución del Taekwondo es constante. Tiene 20, pero ya es un veterano.

Comenzó a escribir su historia en 2012, en el Mundial Juvenil de Egipto. El escenario fue grande, pero la sed de victoria fue más: “Pancho” se sube al pódium. Logra una histórica medalla de bronce para Guatemala.

Era un crío, no es que no lo siga siendo, pero era un crío por el que nadie apostaba y logró vencer el mayor de todos sus miedos: el miedo a perder.

“El mayor temor de todo atleta es el miedo a perder. Creo que otro punto que toca es no entrar a ser preciso en combate. Ese es el mayor temor que un atleta puede tener”, dijo.

MasTKD habló con él en el Centro de Alto Rendimiento de Altura, en Bogotá, Colombia. Comía un sándwich de jamón con queso blanco y se hidrataba. Estaba recostado en las barandas de las gradas que conectan en el coliseo tres con el cuatro, una sudadera gris y un buzo del mismo color. Estaba de humor.

“Soy el hombre más feliz del mundo”, dijo mientras se reía. En verdad: parecía el hombre más feliz del mundo: venía de dar el peso.

 

 

Es un referente dentro del equipo, un líder como diríamos, y a pesar de tener los focos sobre sí: se mantiene con los pies bien en la tierra, pero las metas por la luna.

Primero fue en Costa Rica, esperaba su conexión a Bogotá, leía La Chica del Tren (versión en inglés), vestía una camiseta con “Taekwondo” en grande y con el vaho del Aeropuerto Juan Santamaría decidió contarnos parte de lo que luego confirmaríamos: su gran carisma.

Carga con cinco años de competición élite y dice estar motivado para lograr cazar Tokyo2020. “El sueño de todo atleta… Los olímpicos”.

Ama el Taekwondo, como nada en este mundo y su sueño de ser embajador para ayudar es casi tan fuerte como el de Tokio.

Explica por qué el Taekwondo no es fácil y cree que el taekwondista debe ser fuerte tanto física como psicológicamente.

“Lo más difícil de hacer Taekwondo es ser constante, es llevar día a día esas cargas. Tienes que tener una mente muy fuerte, tienes que ser una persona tanto física como psicológicamente fuerte”, narró.

 

 

Está en su primer año de la carrera de Relaciones Internacionales y ya se proyecta “en una ONG o en alguna embajada donde pueda ayudar a mi país”.

“Mi sueño perfecto sería tener mi familia, tener mis hijos, estar disfrutando mi vida de verdad no arrepintiéndome de lo que hice en el pasado”, cuenta.

Sin embargo, aterriza de nuevo y es consciente que por ahora quiere vivir su sueño, quiere ser el mejor.

“¿Por qué yo quiero hacer esto y qué es lo que vine a hacer aquí? Yo vine a demostrar que puedo ser uno de los mejores y estoy trabajando para ello”, termina.

 

Esteban Mora, Exclusivo MasTKD