Significado-de-Sabon-nim

 

Según los libros de artes marciales, la palabra Sabon nim tiene el significado de “Profesor Honorable”; una persona que entrega un conocimiento valorado en su sociedad. Grado que es otorgado a cintos negros desde el cuarto al sexto dan, el sabon nim tiene la misión de entregar un “conocimiento” marcial y la responsabilidad de formar al alumno integralmente al través del “DO” (camino, desde el punto de vista filosófico). El Sabon nim tendría la función de predicar el correcto desenvolvimiento del individuo que se acerca al donjang (VER NOTA), en la sociedad, promover y mostrar la correcta vía en las artes marciales.

Pero lo más importante es saber, qué es lo que representa para cada uno de nosotros.

Me atrevo a decir que es esa persona que nos acompañó durante esos infernales entrenamientos primerizos, los cuales se hacen eternos.

Además, es esa persona dispuesta a sacrificar hasta su último grado de paciencia, con tal de que su alumno comience a ser el mejor.

Es esa figura que nos corregirá cuando sienta que estamos saliendo del camino, y que nos cargará cuando nos quedemos rezagados.

El Sabon nim… es aquel maestro que nunca va adelante de sus alumnos, sino a su lado. De esta manera nos enseña a buscar soluciones y no a quedarse en los problemas.

Es aquel ser que nos retó a ponernos peto y hacer un combate hasta que el aire faltara, no como castigo sino como vieja escuela: solo para hacernos mejorar.

Es esa voz que comienza fuerte y tenaz al inicio del combate y que al final durante el abrazo de consuelo o victoria nos felicita roncos.

Es el dueño de aquellos brazos que nos abrazaron cuando más lo necesitamos. Por ejemplo: después de haber sido humillados en un combate para el olvido.

Es aquel que brincó, se arrodilló, estiró los brazos señalando a la gloria y se limpió las lágrimas cuando en el pecho nos colgaron la presea dorada.

Es aquel que nos gritó y abofeteó para poder remontar un resultado, para terminar un entrenamiento, para alcanzar la gloria. Todo por nuestro bien.

Es el dueño y mentor de la marcialidad del Taekwondo que se va forjando en nuestro interior. Veámoslo así: es un embajador del Taekwondo.

Eso y mucho más es el Sabon nim. Palabras sobran, sentimientos afloran, las gracias siempre estarán para ese padre que me dio el Taekwondo.

 

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Pero no quiero terminar estas líneas hablando de una manera utópica sobre una persona que carga la gran responsabilidad de reproducir el Taekwondo en nuevas generaciones. Sino que reconociéndole los méritos que ha hecho por nosotros.

Porque, si en algo vamos a coincidir es que, es necesario recordarle a más de uno el respeto que se le debe de tener al Sabon nim. Pues esta máxima todos la conocen, pero pocos la aplican.

Definir Sabon nim es difícil. Es algo muy subjetivo, pero realmente es digno de todas las medallas que el pecho le aguante.

Si bien es cierto, dentro su función y vocación estaba el enseñar.  Pero recuerde que cuando esa persona le permitió ingresar a este estilo de vida llamado Taekwondo es porque creyó en usted.

Realmente el Sabon nim me dio el honor de entrar a una familia. Una grande y que nunca abandona (como una familia de verdad).

Por eso y muchas cosas más es necesario decirle en cada momento: gracias.

Porque por él, hemos vivido los momentos más felices de nuestras vidas.  Esos que se dan en un ocho por ocho y en los que sentimos que tocamos la gloria con las manos. El Sabon nim nos dio algo que no tiene precio: el poder vivir el Taekwondo. Esta pasión a la que llamamos vida.

 

Esteban Mora, Exclusivo MasTKD