ADVERTENCIA: Las líneas que van a leer a continuación no son, de ninguna manera, amigables. El siguiente artículo contiene lenguaje soez, comparaciones que pudieran resultar ofensivas para cierto público y palabras que pudiesen dañar a gente de piel sensible y portadora de taras mentales. Si usted cree todo lo que dice la prensa, no lo lea; si en algún momento ha señalado a la FEMEXTKD como el Gran Satán por las decisiones tomadas en los últimos días, no lo lea; si es un fanático ciego de alguna figura moderna en la escena actual del Taekwondo, no lo lea. La opinión vertida en este semanario es de carácter estrictamente personal, la responsabilidad de la misma es exclusiva de su autor y no representa necesariamente el pensamiento del staff de masTaekwondo.com. Si usted tiene ganas de ver algo feliz, le recomiendo que presione el siguiente enlace, dé media vuelta y se olvide del presente post: http://www.youtube.com/watch?v=QH2-TGUlwu4

“Aquel que valora sus privilegios por encima de sus principios, pronto pierde ambos”. Eisenhower.

Las noticias recientes sobre el anuncio de la Federación Mexicana de Taekwondo respecto a los nombres de los cuatro representantes de México que irán a los Juegos Olímpicos de Londres ha levantado ámpulas en no pocos segmentos dentro de la escena del TKD nacional. Todo mundo ataca a todos, parece ser que hay muy poca gente que está de acuerdo con el resultado y se ha desatado una guerra de declaraciones, justificaciones, notas de prensa y las maldiciones están a la orden del día. Dentro de las redes sociales, cada pandilla cree que ganó su porra y su debate se reduce a descalificaciones de un proceso que ya había sido avalado por todos. Los medios de comunicación parecieran estar de fiesta con estas noticias, para ellos es como un pastel gigante del que tienen que buscar tajada a como dé lugar… Pero vamos por partes:

Todo comenzó cuando anunciaron el proceso de selección que se iba a seguir para conocer los nombres de los cuatro representantes mexicanos en JO. En este espacio comentamos, y lo seguiré repitiendo el tiempo que sea necesario, que no se trataba de un proceso bueno o malo, simplemente era algo diferente. Siempre, en este tipo de procesos, se comete un doble error, uno es por la parte administrativa: no se toma en cuenta al atleta, las decisiones se toman sobre la mesa; el otro error, y el más grave, es por parte del atleta: nunca se alza la voz para opinar. En la Selección Nacional están tan acostumbrados a las imposiciones que ya es algo normal y nadie dice nada. Ojo: alzar la voz no significa actualizar tu estatus de Facebook como muchos lo hacen.

El proceso de selección fue aprobado por Federación, CONADE, Comité Olímpico, cuerpo técnico y atletas participantes… Sí, leyeron bien: ¡ATLETAS PARTICIPANTES! Muchos podrán alegar “Pero es que ni nos preguntaron”, “Nunca estuvimos de acuerdo”, “Les dijimos que no nos gustaba, pero no nos hicieron caso”… Tontos. El hecho de entrar y someterse a un proceso es una señal inequívoca de estar avalándolo. Imaginen esto: llego a un salón de tatuajes, le extiendo mi brazo al tatuador y le digo “Haga lo que quiera” y cuando termina le reclamo porque no me gusto el diseño que realizó, ¿De quién es la culpa? ¿Del tatuador? Piénsenlo bien antes de contestar con el estómago… Una analogía sencilla de lo que acaba de ocurrir. Y digan misa, pero fue exactamente lo que pasó.

Tal vez no estoy muy actualizado dentro de notas deportivas, aun así, la única vez que leí en los medios una declaración de los atletas respecto a su inconformidad con dicho proceso fue cuando terminó el Abierto de España, cuando ya no había nada más qué hacer, cuando ya todo estaba escrito. ¿Proceso ambiguo? Sí. ¿Kafkiano? De acuerdo. ¿Transparente? 100%, y les juro que yo soy una de las personas a las que más trabajo le cuesta aceptarlo.

Después de que la gira fue concluida, una nota cayó como bomba dentro del ya, de por sí, complicado camino de selección. Una nota en donde se decía que iban a castigar a Damián e Idulio por indisciplinas en la gira. El titular de la CONADE decía que ambos taekwondoínes habían incurrido en infracciones al código de ética de la FEMEXTKD, curiosamente la Federación nunca emitió un comunicado oficial respaldando esta postura, al menos no de manera pública, y de hecho en éstos últimos días el Presidente de la Federación dijo (En su perfil de Facebook) que él jamás había mencionado castigo alguno, ni se había dicho nada de sanción alguna. Idulio y Damián también desmienten las acusaciones vía Facebook y Twitter. ¿A quién creerle? Pareciera que nadie conoce otro medio, salvo redes sociales, para expresar su inconformidad. Lo que me queda claro es que, tanto el Presidente, como los dos atletas involucrados, prefirieron tener “likes” y “RTs” que atención mediática. Neta me dan ganas de aventarme por la ventana…

¿Quieren saber cuál es mi teoría de la conspiración al respecto? Fácil: el proceso acordado se respeta cabalmente, esto significa dejar fuera de JO al 3 y 8 del mundo, ¿Qué hacer para protegerte de la opinión pública? Fácil: inventas una indisciplina. Un indisciplina que a nadie le resulta difícil de creer. Una indisciplina que, a mi parecer, es falsa. Y si es falsa, ¿Quién la inventó? Me parece que hay quienes deben una explicación al respecto. Dicen por ahí que cuando el río suena es porque agua lleva, yo les respondo: a veces cuando se oye el mar, no es el mar, sino el vacío.

Finalmente, y en medio de una nube de confusión e incertidumbre, se anuncian los tan esperados nombres… BOOM!! Hordas de fanáticos muestran su descontento… Vía Facebook. Se desata una guerra de declaraciones que vienen a caer fuera de tiempo y de lugar… Vía Facebook. Los medios están de fiesta, ya lo comenté antes, esperen la guerra sucia próximamente en su canal de deportes favorito.

Dicen que el resultado es injusto porque quedaron fuera dos de los hombres que ganaron el boleto olímpico para México… ¿Se acuerdan del semanario que escribí al respecto? En México, ganar un boleto olímpico es un acto de altruismo para con tu país, siempre ha sido así, siempre se supo que así era, quien no lo quiera ver de esta forma es porque no le están funcionando bien las neuronas o sufre de un caso grave de ignorancia al respecto. Escudarse en haber ganado un boleto olímpico para lloriquear por quedar fuera de los Juegos es simplemente mamarracho. Todos los mexicanos que fueron al Pre-Olímpico sabían a lo que iban, sabían lo que se jugaban, así que háganme el favor de parar chupar rifle con ese asunto. Nadie puede decir que le quitaron “su boleto”, porque esos boletos eran de México.

En cuanto a los cuatro que nos van a representar, María, Janet, Diego y Erick: felicidades, ahora tápense los oídos y pónganse a entrenar, tienen enfrente a la madre de todos los compromisos. Sepan de una vez que no llevan cargando a un país en la espalda, somos nosotros, el país, los que los vamos a cargar de aquí en adelante, somos los que los vamos a apoyar hasta el último momento.

A los que dicen que sin Damián e Idulio se pierden las posibilidades de medalla: ¡No sean imbéciles! Cada hombre, mujer o quimera que llega a la Selección Nacional es una medalla potencial para México. Para eso se trabaja. ¿Ustedes creen que los grandes campeones de la historia nacieron sabiendo patear o con las medallas ya colgadas? Los resultados del proceso quizá no son los que muchos de ustedes esperaban, pero empiecen a mostrar solidaridad con la gente que llevará escrito “México” en la espalda el día que el Taekwondo comience actividades en Londres. Vivir polarizado es muy de tercer mundo.

Para la FEMEXTKD: a ver si aprenden de esta experiencia y maduran en sus futuras declaraciones. Compórtense a la altura del compromiso que se tiene enfrente y déjense de niñadas y berrinches pendejos dignos de la vecindad del chavo.

Para Idulio y Damián: yo he vivido con ustedes miles de cosas, aventuras, hemos sudado y llorado lágrimas de sangre juntos, los considero excelentes personas. No puedo decir que entiendo por lo que están pasando, ni tampoco sé cómo se sienten y quien se los diga les aseguro que miente. Son mis amigos y por eso les ofrezco mi hombro para llorar y mi mano para ayudarlos a levantarse, pero no puedo aplaudir de ninguna manera lo que están haciendo. Buscar conmiseración en las redes sociales no es digno de atletas de su talla. Todo lo que están diciendo, escribiendo y declarando, es válido, pero debieron haberlo hecho en cuanto se anuncio el proceso de selección, hoy ya es tarde, hoy son patadas de ahogado. Les pido que dejen de comportarse como niños mimados a los que esta vez no les compraron su paleta al salir de clases, ustedes son más que eso, ustedes son más grandes.

Idulio, Damián, los factores ya no importan. Tengan la humildad de reconocer su derrota… Humildad, esa palabra que forma parte de los valores básicos del Taekwondo y que es tan poco comprendida. Ustedes llevan el Taekwondo en las venas, desayunan, comen y cenan Taekwondo, incluso lo traen escrito en la piel, no actúen como show-men de lucha libre. La única recomendación que les puedo hacer es la siguiente: hagan maletas, vayan a casa, lloren todo lo que tengan que llorar, griten todo lo que tengan que gritar y después vuelvan… Apoyen a los que hoy están delante de ustedes, no habría mayor gesto de amor y solidaridad a su país que el hecho de no darles la espalda.

Idulio, Damián: su país los necesita, esta vez de una forma diferente, pero los necesitamos todos. Los quiero mucho.

 

@ChavaPerezFauno
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