Emilio Casagrande perteneció a las primeras generaciones de practicantes del Taekwondo Argentino, considerado entre el grupo de maestros más antiguos de ese país. Supo formar parte activa en la historia de esta disciplina, siendo inclusive Referee Internacional.

Fue discípulo directo de Nam Sung Choi, uno de los introductores del Taekwondo en Argentina. Cuando era cinturón Púrpura (equivalente al actual Rojo) Emilio Miguel Casagrande, autorizado por su Maestro, comienza la enseñanza en Villa Ballester, Pcia. de Buenos Aires. En marzo de 1974 se abre el Instituto Yun Mu Kwan en forma oficial, y con el correr del tiempo prospera en la Provincia el espíritu del Taekwondo. Muchos cinturones negros egresan y el grado de madurez adquirido requiere por natural evolución la Institucionalización del deporte; así nace el 2 de marzo de 1980 la Asociación de Taekwondo de la Provincia de Buenos Aires.

Paralelamente a su pasión por la enseñanza, también se dedicaba a la dirigencia, cuestión que lo llevó años más tarde a ser presidente de la Confederación Argentina de Taekwondo.

Antes de asumir la presidencia de manera muy controversial en el año 2006, ya formaba parte del Consejo Ejecutivo de la Confederación Argentina que en ese momento lideraba Julio Cassanello. En el año 2000 tuvo la responsabilidad de viajar como Jefe de Equipo a los Juegos Olímpicos de Sydney.

Su etapa como presidente de la CAT fue el comienzo del caos institucional en el que se sumergió el Taekwondo de Argentina, caos que se mantiene hasta el presente. Su gestión al frente del ente rector argentino motivó la intervención por parte de la justicia, la que aparentemente llegaría a su fin el próximo mes de abril, cuando se llamaría a elecciones.

El sábado 12 de abril del año 2008, Casagrande fue protagonista del hecho más desgraciado que se recuerda hasta el momento en Argentina relacionado al Taekwondo. Estando en medio de una reunión de Comisión Directiva, un grupo políticamente opositor, se apersonó en la sede de la CAT argumentando una serie de pedidos, que terminaron en gravísimas agresiones físicas hacia él, el Secretario General y otras personas que se encontraban en la reunión. Estas agresiones dieron como resultado que el presidente de la Confederación Argentina de Taekwondo, debiera ser trasladado de urgencia en estado de inconsciencia.

Lo anterior fue un hecho del que se hicieron eco los más importantes medios de comunicación del país (Ver Nota del Diario Clarín)

Emilio Miguel Casagrande ostentaba el 8vo dan y era amante de la práctica y enseñanza del Ho Sing Sul. Cuando el 29 de septiembre de 2009 aceptó la intervención de la CAT y dio un paso al costado retirándose de la institución, ya no tuvimos más información sobre sus actividades dentro del Taekwondo hasta el día de su deceso.

Sin dudas ha sido un personaje de la historia de nuestro deporte muy controversial en su etapa como dirigente, pero a su vez muy respetado por sus amigos y alumnos, que lo recordarán de la mejor manera.

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